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"La modernidad es lo transitorio, lo fugitivo, lo contingente, la mitad del arte, cuya otra mitad es lo eterno y lo inmutable"

 

Baudelaire en Le Peintre de la Vie Moderne

Claude Monet

La Gare Saint-Lazare, Arrivée d'un Train [1877]
Google Art Project

ENSAYOS Y NOVEDADES

Esta sección recopila: 1. El proceso de obtención de la información sobre los arquitectos, su obra y su contexto. 2. Los trabajos entregados a partir de lo anterior 3. Notificaciones y retroalimentación de los talleres realizados en clase.

  • Foto del escritorGabriela Bautista

INTERIOR Y EXTERIOR, DUALIDAD EN EL PENSAMIENTO MODERNO DE ADOLF LOOS


Oscar Kokoschka: Adolf Loos

1. Friso con línea del tiempo de la vida y obra del arquitecto Adolf Loos.




2. La "caja moderna". Maqueta representativa de la Casa Steiner.




3. La Casa Steiner suena a "La noche transfigurada" del compositor austriaco Arnold Schönberg, gran amigo de Loos.

4. Ensayo: "INTERIOR Y EXTERIOR, DUALIDAD EN EL PENSAMIENTO MODERNO DE ADOLF LOOS".

CASA STEINER

ADOLF LOOS

1910


El Movimiento Moderno fue un conjunto de tendencias de transformación social y cultural emprendido tras la Revolución Industrial, por el disgusto general que se vivía en aquella época tanto por condiciones de vida como por un estancamiento en las tradiciones. Por ello, una serie de artistas, arquitectos y escritores, impulsaron este Movimiento a partir de la ruptura de lo tradicional, siguiendo la sencillez, lo elemental, incorporando nuevos materiales y desarrollando un nuevo lenguaje y nuevas técnicas de construcción. Es así como posteriormente, arquitectos como Adolf Loos [1], Le Corbusier, Mies Van der Rohe e integrantes de la Bauhaus[2], propagaron la idea de hacer un cambio al concepto que se tenía de arquitectura, principalmente en que fuese más sencilla, útil, donde la función importase más que la forma de representarla. Dicho tema se volvería controversial por las diversas interpretaciones que se le darían a esta idea, en especial la del arquitecto Adolf Loos, quien en el proceso de racionalizar su arquitectura se opone al ornamento como un elemento que “no es un producto natural de nuestra civilización, representa un retroceso o una degeneración”, por lo que en la modernidad el uso de éste representa un crimen” Loos, (1908) [3]. Sin embargo, en su Casa Steiner, construida en 1910, tanto como en otras casas que construiría más adelante, vemos que las características que propone Loos frente a la modernidad, como lo es la ausencia de ornamento, la funcionalidad, la jerarquización de espacios, se ven más reflejadas en el exterior del proyecto, su fachada, que en su interior, donde estas ideas se pierden, generando una contradicción en su pensamiento.

La Casa Steiner fue construida en el año de 1910, ubicada en el barrio Hietzing, Viena(Austria). Se dispone del acceso en la fachada frontal de la casa, el cual es generado por el eje central de la composición del proyecto, dicho acceso se encuentra elevado del suelo mediante unos escalones que nos conducen a la segunda planta de la casa, el acceso está flanqueado por dos ventanas y sobre éste se dispone del Dormer[4] en las fachadas laterales encontramos horadaciones, las cuales son empleadas para generar balcones y ventanas las cuales varían en tamaño y jerarquía según su uso, en la fachada posterior encontramos un acceso a la segunda planta de la casa, desde al jardín.

Loos emplea en la fachada frontal bóvedas de cañón a diferencia de las fachadas laterales, la derecha compuesta por pequeñas ventanas y totalmente plana, y la fachada lateral izquierda por el contrario dispone de un cuerpo adicionado simplemente, donde encontramos un balcón, y finalmente la fachada posterior, está compuesta por dos volúmenes adicionados simplemente al cuerpo central de la composición, los cuales flanquean el acceso de la casa mediante el jardín. Loos compone el interior de la casa mediante el uso de la proporción, dotando a los espacios con: mayor área y mayor altura, logrando de esta manera diferenciar cada espacio, jerarquizando sus actividades.

Esta casa nos permite identificar fácilmente cuáles son los elementos que nos llevan a concluir porque es un referente directo de la arquitectura moderna, siendo sus elementos fieles a los cánones que caracterizan al movimiento. En su exterior vemos como la fachada posterior, la del acceso desde el jardín, resalta la sencillez y la austeridad, siendo una fachada poco pretenciosa, lisa, que no posee ningún tipo de decoración, estableciendo una relación muy reducida con su interior, evade el uso del cristal, que exhibe y revela ese carácter íntimo y privado de la casa. La fachada principal, dónde Loos dispone del dormer, es el claro ejemplo de una arquitectura funcional, que es una tendencia de la arquitectura racionalista según la cual la forma de un edificio procede de su función, y que hace prevalecer la esencia de lo moderno frente a lo tradicional, principio por el cual la forma de los edificios sólo debe ser la expresión de su uso o función. “Para cumplir una ordenanza municipal, según la cual la fachada a la calle no podía superar la altura de una planta (exceptuando el ático), Loos construyó una cubierta de plancha metálica en forma de bóveda de cañón que concluía en la cubierta plana que remataba la fachada opuesta de tres plantas de altura.” Shezen, (1996). La curvatura que se logra en la fachada logra satisfacer las necesidades de la familia Steiner, un hogar con espacios amplios, de gran altura y completamente iluminados, sin incumplir la norma vienesa “que limitaba a un piso la altura de la fachada de la calle” Shezen, (1996).

Este arte, representado en el ornamento, era el que Loos desaprobaba. Decía: “el ornamento es fuerza de trabajo desperdiciada y por ello salud desperdiciada. Así fue siempre. Hoy significa, además, material desperdiciado y ambas cosas significan capital desperdiciado” (Loos, 1908). Además, “como el ornamento ya no pertenece orgánicamente a nuestra civilización, tampoco es ya expresión de ella. El ornamento que se crea hoy ya no tiene ninguna relación con nosotros ni con nada humano; es decir, no tiene relación alguna con la actual ordenación del mundo” (Loos, 1908). No cumplen función alguna en el contexto histórico en el que se encuentran, resultando como un intento fallido de embellecer un objeto el cual no puede valerse por sí mismo para ser considerado como algo bello. Pese a esta opinión, en su interior refleja otra apariencia física puesto que Loos emplea diferentes materiales que le ayudan a enriquecer su arquitectura, el mármol y la madera fina son materiales protagonistas, los cuales se oponen a la simplicidad presente en su exterior, denotando un quiebre entre el adentro y el afuera, rompiendo esa austeridad característica del modernismo que proponía Loos, muy diferente al modernismo de la Secesión Vienesa, movimiento cuya estética se basaba en las formas curvilíneas, los materiales lujosos, las fachadas decorativas y el ornamento, considerado como el “Art Nouveau” vienés, movimiento artístico que surge a fines del siglo XIX y se proyecta hasta las primeras décadas del siglo XX. Recurría a líneas sinuosas y composiciones asimétricas. Los motivos más frecuentes eran flores, hojas y la figura femenina. Se aplicó al diseño de interiores, joyas, forja, vidrio, cerámica, telas y, sobre todo, a la ilustración, que alcanzó gran popularidad gracias al invento de la litografía.

Particularmente, esta casa es muestra de ello, porque si bien el exterior es un claro ejemplo del Movimiento Moderno, con una sencillez evidente, con sus paredes completamente blancas, no se podría decir lo mismo del interior, en donde, a primera vista se pueden ver materiales ostentosos, expresivos, que le otorgan un carácter muy diferente al que el exterior define, “veía el interior como en la cara privada de la casa. Y, como tal, debía reflejar el gusto personal del propietario” (Schezen,1996). En este punto llegamos a la contradicción entre el interior y el exterior de la casa. Por ende, se podría interpretar como el ornamento oculto tras la austeridad, lo clásico tras lo moderno.

Esta notoria contradicción que se ve reflejada en una dualidad entre el carácter público y privado que es claramente distinguible en la Casa Steiner, da mucho que pensar acerca del concepto que Loos tenía a la hora de diseñar sus proyectos. Para él, el exterior no es más que la total comprensión de cómo emplazar un edificio, siendo su fachada la cara pública del mismo, la cual debe ser una continuidad con las preexistencias del lugar en el que el proyecto está siendo ubicado. Por otra parte, el interior de la casa debe ser visto como la oportunidad de reflejar y expresar todas las intenciones del arquitecto, que le dé a la casa la riqueza espacial y funcional que se quiere mostrar. La Casa Steiner está distribuida a partir del concepto de “Raumplan”, que es una forma de organización del espacio en la cual la actividad predomina en área y volumen, siendo la función de cada espacio la que dicte las dimensiones y jerarquías de cada uno de los mecanismos de la vivienda.

Sin embargo, aunque el “Raumplan” sea un concepto moderno, que se basa en cómo distribuir las alturas de la casa según su función, en los acabados del interior que denotan la importancia del carácter privado que Loos busca darle a todos sus proyectos. la simplicidad y austeridad que Loos muestra en la fachada de la Casa Steiner no es un reflejo del interior, este está mucho más trabajado y pensado para deslumbrar a quien entre a la vivienda. Loos evidencia la complejidad del interior en el uso que le da a los materiales, en donde Loos (1898) comprende que: “Cada material tiene su propia forma de expresión, y ningún material puede tomar para sí la forma de otro material. Porque las formas se han hecho a través de la utilidad y de la fabricación de cada material” (p.151) es por este motivo que, en la Casa Steiner, expone vigas vistas de color marrón oscuro y un artesonado de madera en roble, los cuales muestra sin ningún tipo de ornamento ni exceso de forma, más que la que tiene por utilidad el material.

Loos aplica el Principio del Revestimiento en todos sus proyectos, esto se ve reflejado claramente en el mobiliario que usa en cada vivienda, en las alfombras, el uso del mármol y en los artesonados de madera en roble que antepone a los muros. Él no solo aprueba este tipo de revestimiento si no que lo utiliza en la Casa; Porque, los elementos que Loos utiliza son puros, no pretenden ser otra cosa, en ese punto se entiende que el revestimiento está bien visto siempre y cuando su intención sea la de ser revestimiento y nada más, que no haya un intento alguno de parecer un objeto distinto, Loos (1898): “La madera puede pintarse con cualquier color, menos con uno, el color madera” (p.152).

Es así como la Casa Steiner, es un ejemplo claro de la importancia que Loos le da al revestimiento y a la pureza del material, al cual le da valor no solo por su cualidad de elemento propio, si no por todo el esfuerzo y trabajo que conlleva transformarlo para emplearlo en la construcción de la casa. Por eso Loos (1898) afirma: “Esta gente dice “material” y se refiere a “trabajo”, Para valorar un objeto no solo cuenta la cantidad, sino asimismo la calidad de la obra realizada.” (p.149).

Por lo tanto, la dualidad que plantea Loos entre el interior y el exterior al diseñar la Casa Steiner, es evidente en cada detalle de la misma, vemos la austeridad y la simplicidad de la fachada que denota un ritmo con las preexistencias de su entorno, sin buscar opacar ni sobresalir, para al final, deslumbrar al usuario con un interior que conserva la característica de su “modernidad” que es la importancia de la funcionalidad y pureza de los materiales, que se ve reflejado en el uso y ubicación de elementos propios del lugar que se organizan armoniosamente, en una planta jerarquizada por distintas alturas que denotan el valor propio de cada actividad de la casa.


 

[1] Adolf Loos (Brno, República Checa 1870- Viena 1933) fue uno de los arquitectos más influyentes del siglo XIX, pionero del Movimiento Moderno, que defiende la desornamentación y la ruptura con el historicismo.


[2] La Bauhaus es un movimiento que se caracteriza por formas simples y claras y por la utilización de materiales novedosos en todo tipo de edificios.


[3] Loos, A. (1980). Ornamento y delito y otros escritos. Barcelona: Gustavo Gili.


[4] Estructura arquitectónica vertical compuesta por ventanas, sobresale de los techos inclinados, añaden luz y ventilación a los espacios.


Bibliografía.

Adolf Loos. El principio del Revestimiento. Viena: Escritos I, 1898

Adolf Loos. Los Materiales de Construcción. Viena: Escritos I, 1898

Página 7, El-arte-decorativo-de-hoy, Le Corbusier, 1925.

Página 45 a 57, Adolf Loos, Carlos Martí y Antonio pizza, 1989.

Raumplan versus plan libre, Max Risselada, 1991.

Ornamento y delito y otros escritos, Adolf Loos, 1972.

ADOLF LOOS, Arquitectura 1903-1932, Roberto Schezen, 1996.


ESTUDIANTES:

GABRIELA BAUTISTA RODRÍGUEZ

NICOLÁS RICARDO ADAME HIGUERA

DANIEL ANDRÉS SERRANO LOZANO


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